Alrededor de 20 a 70 por ciento de todos los adultos tendrán dolor de cuello que interferirá en su vida cotidiana. Puede que le duela el cuello al levantarse si no ha dormido bien. O puede ocurrir al final del día, cuando estás sometido a mucho estrés. Hay una diferencia entre la rigidez y el dolor tan intenso que no puedes hacer nada más. Por suerte, puedes obtener ayuda de un quiropráctico especializado en dolor de cuello.